"En 1968 los jubilados seguían mal pagados y sin servicios asistenciales. Los sindicatos no les prestaban atención por diversas causas y luchas intestinas entre sus dirigentes”, dice en sus testimonios Luis de Salvo (1904-1989), dirigente obrero ejemplar, militante ferroviario y del movimiento de jubilados. Y continúa señalando: “La organización de los jubilados venia de muchos años atrás, pero estaban desunidos, en centros independientes, comisiones en los sindicatos y un sin numero de federaciones provinciales y nacionales”. Con el objetivo de impulsar la defensa de los derechos de los jubilados”... nos reunimos, de distintos gremios” y “... creamos el embrión de lo que luego seria la Mesa Coordinadora... y convocamos al primer Congreso que se efectuó en el local de la CGT., en 1968...” El Congreso eligió su dirección “ ... Así nació la Mesa Coordinadora Nacional de Organizaciones de Jubilados y Pensionados de la República Argentina”. En todo este tiempo (se refiere a la gran actividad que desplegaba la Mesa) hemos estado defendiendo no sólo los intereses y justos reclamos de los jubilados y pensionados, sino también los de la clase obrera y del pueblo todo, sin hacer nunca partidismo en su seno, en forma unitaria, teniendo cabida todas las expresiones de las distintas corrientes de opinión entre los trabajadores jubilados y pensionados”. “Dos grandes principios permiten el mencionado éxito de su accionar: democracia y ninguna clase de discriminación, esto asegura una unidad real”, enfatiza De Salvo en sus memorias y añade que una de las formas más participativas de la democracia son las asambleas: tanto de los socios de los centros como las generales de cada localidad. La Ley 19.032
“Los jubilados, salvo los bancarios, los ferroviarios, los empleados de comercio y algunas otras, no tenían ningún servicio asistencial, iban a parar a los hospitales municipales cuando ya se sentían morir. Con la gran concentración de 1971 logramos del ministro Manrique la Ley 19.032 que estableció el Instituto Nacional de Servicios Sociales para Jubilados y Pensionados... Esto ha sido una gran conquista para los jubilados y los autónomos que no tenían absolutamente nada.” Lo decía De Salvo en los años 70 y aún hoy estamos en esa lucha. Los Haberes
El movimiento de lucha logró arduamente varias leyes que significaron importantes mejoras para los jubilados, como por ejemplo el 82% móvil de salario en actividad, préstamos para vivienda, viviendas en comodato, la equiparación del haber del jubilado y el pensionado, la eximición del impuesto municipal, y otros actualmente derogados por la inconsulta e inconstitucional Ley 24.463- un verdadero baldón para la triste memoria de todos los legisladores que la sancionaron- . Esta Ley dice que ahora el Estado, no las Cajas ya liquidadas, pagará las retroactividades adeudadas e incluso los haberes jubilatorios, en la medida que tengan recursos, los que se ven reducidos por la evasión en el pago de impuestos y aportes previsionales por parte de muchas empresas, por el pago en negro a los trabajadores, los bajos salarios, la desocupación creciente, y los aportes que, por temor, desconfianza de la gestión del Estado o simple desinformación, buena parte de los trabajadores realizan a las administradoras de fondos de jubilación y pensión (AFJP). Antecedentes
Las luchas para constituir las Cajas de Jubilaciones para los trabajadores argentinos se remontan a las huelgas de 1912 de los Fraternales y las de 1917-18 del resto de los trabajadores ferroviarios, así como la Caja tripartita de representantes de los trabajadores bancarios, de las patronales bancarios y del Estado, que dio como resultado la creación de la Asociación Bancaria –sociedad de empleados del Banco- en el año 1925. sucesivamente nacieron las demás Cajas, hoy absorbidas por un organismo del Estado, el ANSES, de actuación contradictoria, que con su gestión esta creando las condiciones para la definitiva y total destrucción del sistema previsional.